Tren Maya

Se espera que el Tren Maya movilice todo el combustible en el sudeste de México a principios de 2023, un mercado con un valor de hasta 13 mil millones de pesos por año.

La viabilidad financiera del Tren Maya, probablemente el proyecto de infraestructura más importante de la administración de AMLO, se centra en el transporte de pasajeros y carga en el sureste de México, pero solo moverá el 0.6 por ciento de la carga que se transporta a nivel nacional cada año.

“El 82 por ciento del total de la carga transportada por México se concentra en dos compañías: Ferromex y Kansas City Southern of Mexico, que son básicamente las líneas de Pacific Railway.

"La línea de carga que el Tren Maya quiere construir representa el 0.6 por ciento de los bienes que se mueven en México", dijo Ana Thaís, investigadora del Instituto Mexicano de Competitividad (IMCO).

Esto contrasta con el plan financiero del ferrocarril en el sureste de 1.470 kilómetros, que espera encontrar en el transporte de carga los fondos necesarios para pagar el proyecto en el que se invertirán 144.500 millones de pesos.

En los últimos días, el titular del Fondo Nacional de Desarrollo Turístico (Fonatur), Rogelio Jiménez Pons, explicó que la rentabilidad económica del ferrocarril vendrá del movimiento de carga y carga de energía, una de las principales apuestas del Gobierno para capitalizar El proyecto de infraestructura.

Por lo tanto, se espera que el Tren Maya movilice todo el combustible en la región sureste de México a principios de 2023, un mercado con un valor de hasta 13 mil millones de pesos anuales.

El movimiento de mercancías por ferrocarril es un 30 por ciento más barato que el transporte terrestre, además de ser 100 veces menos contaminante que el transporte por carretera.

El problema es que, de acuerdo con el plan oficial, la transferencia de mercancías del tren Maya se utilizará para pagar los 144.5 mil millones de pesos que costará el proyecto.

Fondos y bancos extranjeros buscan financiar el Tren Maya

El proyecto de infraestructura más importante del gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha despertado el interés de seis fondos y bancos extranjeros, que ya están negociando con el Gobierno Federal la financiación del proyecto, que asciende a entre 120 y 150 mil millones de pesos.

Entre los interesados ​​en invertir se encuentran dos fondos de inversión estadounidenses, dos compañías mexicano-españolas, una firma canadiense y algunos bancos europeos, según Rogelio Jiménez Pons, jefe de Fonatur.

"Estamos hablando de pesos pesados, las principales ligas de organizaciones financieras, bancos mundiales, bancos de desarrollo como CAF, ya estamos en negociaciones con algunas de estas instituciones".